Rojo por fuera blanquito por dentro

El candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), anda como un gallo tuerto buscando y dando tumbos, para conseguir adeptos que fortalezcan sus aspiraciones de llegar al Palacio Nacional.

Todo esto, es porque las ultimas mediciones de firmas encuestadoras como la ASISA y la más reciente Hamilton, confirman el descenso estrepitoso de su candidatura y el crecimiento indetenible de la candidatura del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y el licenciado Danilo Medina Sánchez.

Hace poco, el equipo de campaña del ingeniero   Mejía quiso causar un bum  estratégico con el anuncio de que varios dirigentes del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), pasaban a apoyar sus aspiraciones y, así dar la percepción de que sus fuerzas se estaban fortaleciendo.

Pero, que ignorancia política más grande presenta el PRD, con ese golpe de efecto que quisieron dar, y que no produjo ninguna sensación  ni expectativa  en el pueblo,  debido a que a los votantes dominicanos están al tanto de lo que pasa en la vida política de este país y no tardaron en identificar que se trataba de la reeditación de la tal perdedora “Alianza Rosada” que solo ha hecho que los perredeístas de la base sigan fuera del poder.

Porque cuando esos dirigentes reformistas se fueron a pactar con el blanco en la pasada alianza, se fueron como siempre y han estado solos, aun en su propio partido.

Ese grupito que se fue con el PRD, y que se  dice llamar balagueristas-reformistas fieles al  pensamiento del doctor Joaquín Balaguer Ricardo son  un  fraude,  escondido siempre bajo el nombre de su líder y del color rojo de su partido, pero haciendo siempre causa común con el PRD, organización que Balaguer le llamó en uno de sus discursos el CAMINO MALO, y que por ende había que buscar la forma de cerrarlo totalmente por el  peligro que representa ese partido para el progreso y el bienestar de la nación.

Mientras que los verdaderos reformistas se mantienen firme en su partido,  lo que quiso siempre su máximo líder, están en espera de las deducciones de su presidente don Carlos Morales Troncoso que sabrá guiar a sus dirigentes donde estén representados sus mejores intereses sin traicionar el pensamiento del  doctor Balaguer, ni mucho menos matar el gallo colorao, símbolo de esa organización política que cantó siempre en contra del PRD.

Autor: Maria Victoria Ureña